viernes, abril 17, 2015

Dos intrusos entre las estrellas de M46


Los cúmulos de estrellas abiertos o galácticos son relativamente jóvenes (*). Estos enjambres de estrellas se forman en comunidad cerca del plano de la Vía Láctea, pero el número de sus componentes disminuye regularmente, ya que mareas galácticas e interacciones gravitacionales los terminan por dispersar (clic en la imagen para ampliarla a 1024 x 682 píxeles o verla aún más grande).

El brillante cúmulo abierto de arriba, conocido como M46, se encuentra a unos 5 000 años-luz de distancia, en la constelación de la Popa (Puppis en latín). Tiene apenas unos 300 millones de años y todavía está constituido por varios cientos de estrellas en un campo de aproximadamente 30 años-luz.

Sin embargo, M46 también incluye dos objetos que al parecer contradicen la juventud del cúmulo. En la bonita panorámica estelar que protagoniza la entrada de hoy se distingue una pequeña mancha colorida y circular, arriba y a la derecha del centro de M46. Se trata de la nebulosa planetaria NGC 2438.

Una segunda nebulosa planetaria, PK231+4.1, aún más tenue que la anterior, se encuentra identificada con el recuadro y ampliada en el rincón superior derecho.

Las nebulosas planetarias son la fase breve y final de la vida de una estrella similar al Sol, una clase de estrellas de varios miles de millones de años que ya agotó su reserva central de combustible de hidrógeno.

En realidad, se estima que la antigua NGC 2438 se encuentra a sólo 3 000 años-luz de distancia y se desplaza a una velocidad diferente de los miembros del cúmulo M46.

Es probable que ambas nebulosas planetarias correspondan a objetos ubicados en primer plano que sólo por azar (en la imagen de arriba a la derecha) aparecen en nuestra línea de visión de las juveniles estrellas de M46.

Nebulosas planetarias. Una animación que reúne diez nebulosas planetarias, cada una de ellas registradas en la estrella central. En orden, sus nombres de catálogo son NGC 1535, NGC 3242 (Nebulosa del Fantasma de Júpiter), NGC 6543 (Nebulosa del Ojo del Gato), NGC 7009 (Nebulosa Saturno), NGC 2438, NGC 6772, Abell 39, NGC 7139, NGC 6781 y M97 (Nebulosa del Búho). Esta gloriosa fase final de la vida de una estrella dura apenas unos 10 mil años. Más información (algunos enlaces de este párrafo apuntan a páginas en inglés).

Vía Foto astronómica del día correspondiente al 17 de abril de 2015. Esta página ofrece todos los días una imagen o fotografía del universo, junto con una breve explicación escrita por un astrónomo profesional. Crédito de la imagen y derechos de autor: Denis Priou.

(*) John Mitchell concluyó en 1767 que era probable que los cúmulos estelares estuviesen vinculados físicamente en vez de ser colecciones casuales de estrellas. Según sus cálculos era muy improbable (1/496.000) encontrar un cúmulo como el de las Pléyades en algún lugar del cielo, por no mencionar todos los cúmulos abiertos conocidos en aquel momento. Es más, supuso que todas o por lo menos una parte de las nebulosas conocidas para la época estaban constituidas por estrellas. Mädler encontró que las Pléyades y otros grupos estelares tenían un movimiento propio común, mientras que Richard A. Proctor lo demostró para la Asociación estelar de la Osa Mayor. Así se estableció con mayor fuerza la vinculación física entre los componentes de los cúmulos estelares. Por último, se determinó por espectroscopía el movimiento propio radial (velocidad) de los cúmulos estelares y que las estrellas eran compatibles con el diagrama Hertzsprung-Russell (HRD), lo que indicó que todas se hallaban a la misma distancia. La confirmación final de que las estrellas se encuentran aproximadamente a la misma distancia surgió de la medición directa de las paralajes de algunos cúmulos próximos, llevada a cabo por observatorios terrestres y por el satélite astrométrico Hiparco, de la ESA. Más información (en inglés)..

Nota: Síganme en Twitter (@astrosofista) para saber más sobre el universo y mi mundo. Desde que comencé a tuitear hace ocho equinoccios, unos 40 mil tweets ilustran y amplían las más de 4000 entradas publicadas en el blog desde su inicio, en mayo de 2004. ¿Qué esperan para unirse a esta gran conversación? Ya somos más de dos mil ochocientos.